Cada mobiliario es único. Su terminación metalizada le otorga singularidad. La mano artesana imprime su gesto. No hay dos piezas idénticas. Como las vidas que alojan, cada una porta su signo.
Gestos modernistas que combinan lo recto y lo curvo, metales añejados y tintes remiten a la naturaleza e introducen la mixtura como concepto vital. Contenido y forma se actualizan desde un
paradigma contemporáneo.
Mobiliario que se adelanta a su época. Amalgama entre tecnología y artesanía. Innovación al servicio de la calidez y el encuentro.
Las estructuras van cambiando y el diseño cuando está vivo lo recupera. Sutiles ondulaciones, espacios flexibles y lenguaje austero. Una combinación que acompaña los nuevos tiempos.
La intervención manual crea un efecto añejado, generando superficies que despiertan sensaciones e invitan al tacto.
La vajilla a la vista llama a introducirse en el arte de la cocina, a combinar sabores e historias y reinventar los vínculos.
Un diseño de anticipación que acompaña el ritmo de la vida. Donde los espacios tienden a la neutralidad, la simpleza y la continuidad que caracterizan los tiempos por venir.